LUZ

SENSOR DE RADIACIÓN ULTRAVIOLETA

Medida de la radiación ultravioleta (UV) con sensores de Apogee Instruments

La radiación ultravioleta (UV) constituye una porción del espectro electromagnético de 100 a 400 nm y se subdivide a su vez en tres intervalos de longitud de onda: UV-A (315 a 400 nm), UV-B (280 a 315 nm) y UV-C (100 a 280 nm). Gran parte de las longitudes de onda UV-B y todas las UV-C procedentes del sol son absorbidas por la atmósfera terrestre. Y por supuesto también existen múltiples fuentes artificiales de luz UV. 

La mayoría de los sensores UV diseñados para medir la luz solar son sensibles a la radiación UV en los intervalos UV-A o UV-B.  

 

Las aplicaciones típicas de los sensores UV incluyen medir la radiación UV entrante en entornos exteriores o en laboratorios con fuentes de luz artificial (por ejemplo, lámparas germicidas). 

La radiación UV-A es importante en la ciencia de materiales y tiene numerosos efectos fotobiológicos. Por ejemplo, la exposición a la radiación UV puede hacer que las plantas produzcan compuestos secundarios, como flavonoides y antioxidantes.  

La radiación UV-A también puede tener efectos sobre el medio ambiente, incluyendo la fotosíntesis de las plantas y la producción de ozono en la atmósfera. La medición de la radiación UV-A es importante para comprender estos efectos y su impacto en los ecosistemas terrestres y acuáticos. En entornos agrícolas ayuda a comprender cómo afecta a las cosechas y a desarrollar estrategias para protegerlas de los efectos nocivos. 

La radiación UV-A es útil para monitorear la calidad del aire y la composición de la atmósfera. Puede utilizarse para estudiar la formación de ozono y otros contaminantes atmosféricos, así como para evaluar la efectividad de medidas de control de contaminación. También son importantes para comprender el clima y los cambios atmosféricos a largo plazo. Pueden ayudar a rastrear los efectos del cambio climático en la radiación solar y su impacto en el clima global. 

Sensores de UV-A de Apogee Instruments

Los sensores UV-A de la serie SU-200 de Apogee Instruments detectan la radiación UV de 300 a 400 nm y están calibrados en unidades de densidad de flujo de energía, W m-2 (igual a J s-1 m-2) para el intervalo de 315 a 400 nm. La salida también puede expresarse en unidades de densidad de flujo fotónico, μmol m-2 s-1. Son robustos y fiables. 

Características técnicas generales

Los sensores de la serie SU-200 de Apogee Instruments constan de un difusor de cuarzo sinterizado, un fotodiodo y un circuito de procesamiento de señales montados en una carcasa de aluminio anodizado y un cable para conectar el sensor a un dispositivo de medida.  

Los sensores están encapsulados, sin espacio de aire interno, en un cuerpo de aluminio robusto anodizado y la electrónica está totalmente protegida. Están diseñados para medir en continuo la radiación UV-A en entornos interiores o exteriores. 

La salida de los sensores es una señal (analógica o digital según el modelo) que es directamente proporcional al PPF bajo la radiación (solar o de otra fuente de luz) incidente sobre una superficie plana (no tiene que ser horizontal), donde la radiación emana de todos los ángulos de una semiesfera. 

 

La carcasa es robusta y autolimpiable. El cabezal del sensor con forma abovedada patentada facilita la evacuación del rocío y la lluvia, lo que ayuda a mantener limpio el detector y minimiza los errores causados por el polvo que bloquea la trayectoria de radiación.  

 

Cable de 5 m (se pueden personalizar) 

FOV 180 ° 

Peso 140 g (incluyendo los 5m de cable) 

4 años de garantía